domingo, 18 de diciembre de 2011

El medio vial

(Escrito el 10 diciembre 1996)

Cuando veo esos monstruos
de maquinaria pesada,
que se comen las montañas
que rellenan las vaguadas,
que mueven esos pedruscos
que árboles grandes talan,
que transportan esas vigas
que de un golpe las instalan,
me viene al pensamiento
la evolución que ha sufrido
y lo poco que conocen
los que ahora mucho hablan,
cuando van por carreteras
que llamamos secundarias.

Unos critican las curvas
y otros la estrecha calzada,
pero muy pocos conocen
cómo era en proyecto
y como fue ejecutada;
yo sí podría deciros
pues alguna conocí
empezarla y terminarla.

Marcada con las estacas
se empezaba a abrir la caja,
las herramientas comunes
eran el pico y la pala,
y el transporte de la tierra
en vagonetas se echaba;
unas veces de ella un macho
con los tirantes tiraba,
y otras veces los peones
la vagoneta empujaban.

Y así un día tras otro
el proyecto iba bien,
se va viendo el suelo firme
y también el terraplén.

Cuando salía la piedra
se ponía dinamita
mas la explosión no se hacía
hasta que estaba ella lista;
el agujero se haría
a base de barrenar
a mano naturalmente
pues otra cosa no hay,
un poco de agua y barrena
era todo el material

Ya la caja está abierta
ahora hay que rellenar,
hay que llenarla de grava
extenderla y machacar;
para estos menesteres
unas cuadrillas las hay
que llamaríamos burreros
alegres, trabajadores,
como ahora pocos hay.

Los viejos con las espuertas
en el río a llenar,
los más jóvenes con burros
la grava hay que llevar,
sin pararse ni hacer colas
sólo se oye arrear
a los burros no es preciso
ni llevarles del ramal.

Aquí no sólo van hombres,
mujeres también las hay,
con el pañuelo al cuello
y el pantalón bien ceñido
y con la vara en la espalda
marcando bien la cadera
y el pelo recogido;
el domingo en el baile
alguno exclamará
¡que burrera! ¡ay Dios mío!

La grava hay que extenderla
y tras ello machacar
martillo con mango largo
es la herramienta ideal,
con ella se para poco
si has de sacar el jornal
el trabajo es a destajo
y al terminar la jornada
te medirán lo que hay.

Luego a tender la tierra
y con molón y animal
apretar un poco aquello
que firme le llamarán;
con esos escasos medios
la tuvieron que trazar,
por ello no te sorprenda
cuando al ir ahora con coche
a lo largo del trazado
demasiadas curvas hay.


Próximo tema: “ Los Infiltrados”

No hay comentarios:

Publicar un comentario