lunes, 29 de agosto de 2016

¡ Al Puente !



(Escrito el 1 de abril de 2016)
El puente siempre sirvió
para unir las dos orillas,
esa misión es la suya
tan ejemplar y sencilla.

Algunos fueron muy simples,
una tabla de madera,
sujeta, que nadie arranca,
a ese paso le decíamos
simplemente la palanca.

Se ponían en barrancos,
en ríos con mil amores
por ellos era frecuente
que pasaran los pastores.
Otras veces a estos puentes
algo de anchura se ha dado
servía para que pase
junto al pastor el ganado.

Otros ya los vi yo hechos
con buena piedra y sus manos
eran los que no dejaron
aquellos hombres romanos.
Después conocimos otros
de la manera que fuera
unía las dos orillas
la llamada pasarela.

Pronto vino el progreso
y cambiaría el medio,
los puentes ya se hacían
sin ningún pilar en medio,
las grandes sirgas de acero
suplían este remedio.

Pero llegó el 2008
y con él, el gran invento
nos construyeron un puente
que ahora mismo os lo cuento.

Sería para la EXPO
que tanto movió a la gente
y estrenaron la gran obra
como era el Pabellón Puente.

Desde luego la gran obra
papel de puente cumplía,
pero muchos pensaríamos
después que cierre la EXPO
¿para qué nos serviría?
Todo eran planteamientos
junto con suposiciones,
el Puente puede servir
para hacer exposiciones.

Desde que cerró la EXPO
ocho años han pasado,
y pregunto al que lo sepa
¿qué fin al Puente le han dado?
por cualquier parte que vayas
el Puente siempre cerrado.

Ignoro quién lo pensó
o tal vez pudo soñar,
el responsable de ello
nos debía de explicar
el motivo de hacerlo
y el destino que tendrá.

¿Qué es una obra bonita?
¡eso ni hay que dudar!
pero con ese dinero
otras cosas más útiles
se pudo ejecutar,
sin embargo en esos días
parece que se quería
el simplemente gastar.

Ignoro si este gasto,
lo tuvo que sufragar,
Zaragoza, municipio,
o fue a nivel Nacional,
pagase el que lo pagase
para mí fue obra fatal,
y si es que aun se debe
eso aun, está más mal.

Con estos grandes cerebros
que programan cosas de estas,
para días hay aun deudas,
pues además de las obras
habrá que pagar las fiestas.

Más al pobre ciudadano
sólo le queda callar,
ante sí, tiene un puente
que no lo puede cruzar,
es mejor la pasarela
¡no vayas a comparar!

Próximo tema: Consultando a las bases

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