(Escrito el 17 de abril 2018)
Después de estar escuchando
durante tantos días, durante tantas horas al día y en todos los Medios de
Comunicación el tema del Master, Celedonio
se pone a reflexionar y se pregunta: ¿por qué a todos los políticos no se les
exige un Master que bien podría llamarse Master Ciudadano?
¿Quién lo impartiría? No
haría falta ni asistir a clase. Tan sólo tendrían que presentarse al examen
y superarlo.
¿Quién formaría el tribunal?
Para hacerlo más fácil, los jubilados que tienen tiempo libre.
¿Qué materias incluiría?
Dependería del puesto que quisieras ocupar. No sería lo mismo para Concejal de
Pueblo, que para ser Diputado a nivel Autonómico o Nacional. Habría grados
y para optar a un Grado Tres por ejemplo
tendría que haber aprobado los niveles más bajos. Como esta titulación sería
nueva, con el paso del tiempo se tendría que ir perfeccionando.
¿Dónde se harían las pruebas? Siempre en
la mejor ubicación posible.
A título de ejemplo, se exponen
a continuación algunas de las pruebas:
A).- Demostrar que con el salario
mínimo se puede pasar el mes. En un piso en alquiler, se ubicaría el
aspirante y dos miembros de su familia. Tendrían que alimentarse los tres,
hacer vida normal y pagar todos los gastos. La nota final vendría en función de
la cantidad que les sobrase. Supervisores: las amas de casa
jubiladas que hubiese en ese bloque.
B).- Manejo del agua en el huerto.-
Tendría que regar con poca agua los distintos cultivos que se dan en él. El
objetivo sería ver si llega a dominar la fórmula que Caudal es igual a Sección por
Velocidad, para que pueda recapacitar y actuar frente a las riadas. Supervisores:
Los jubilados de los huertos colindantes.
C).- Conocimiento del Medio
Ambiente.- En un pueblo semi – abandonado, pasar un mínimo de 15 días con algún familiar más,
sin medio de locomoción propio, aprovechando principalmente lo que da la
naturaleza. En los temas de caza y pesca se tendría que atener a la legislación
vigente. Supervisores: alguno de los vecinos, que se abstendría de darle
consejos.
D).- Carnet de senderista.-
Bajaría desde la carretera al barranco por un terraplén. Se valoraría la forma
de poner los pies al bajar, el tiempo que le cuesta, los pedruscos que
arrastra, etc. Se podría apoyar en un palo, siempre que fuese él el que se lo
preparase. Supervisor: cualquier pastor de la zona.
Estos son algunos pequeños
ejemplos que se podría incluir. Caso de
aceptarse, los ciudadanos propondrían muchísimas más pruebas, así como puntos
para examinarse que un Tribunal seleccionaría.
Si hasta la fecha, muchos de los
Másteres que tienen o dicen tener, no sirven para mucho ¿por qué despreciar el Master
Ciudadano?
Próximo tema: No habrá levantamiento