domingo, 26 de julio de 2020

Desde mi encierro (03)


(Escrito el 7 de abril 2020)
Como verá el lector, en el día hoy, cumplimos los 25 días de encierro. Celedonio, no quiere echar leña al fuego, sino como es habitual en él tan sólo busca reflexionar.

Algunos comparan a la situación que estamos pasando como una guerra. No tiene punto de comparación, pero si una nación vecina nos hubiese invadido, a estas horas pienso que España podría estar como Belchite el Viejo. Hubiésemos sucumbido por caos, por más de que nos consideremos descendientes de los numantinos y algo de ellos llevaremos por nuestras venas.

Creo que todos nos hemos reído mucho con los distintos pasajes que nos rememoraba el humorista Gila. Cuando nació, cuando estaba en la guerra, etc. Tristemente en estos días también nos han venido a nuestra cabeza.

Nuestra pertenencia a la Comunidad Económica Europea, la integración en un mundo globalizado, etc, siempre lo hemos considerado como un signo de progreso, como de una nación moderna, democrática y todo lo que le queramos añadir, pero con el mayor respeto, tenemos que reconocer que:

De los acuerdos, ya no sé si firmados o simplemente comprometidos, nadie se puede fiar de nadie. Nos hablan de cargamentos de material sanitario que tenían un destino determinado y al hacer escala el avión tranquilamente le plantean: esto es para mí, pues te voy a pagar más. El nuevo destino es el válido y el otro a esperar la mercancía.

Por chivatazo, inspección o casualidad, descubren que en un almacén que tenía que haber no se cuanto, no hay nada. El espabilado de turno se la había vendido a otra nación  nada menos. Y aquí no pasa nada.

Cuando hemos sido toda una potencia industrial en lo textil y las mujeres en sus casas hacen mascarillas para la familia u otros destinos, de la forma mejor que pueden, toda nuestra industria es incapaz de abastecer el mercado nacional y nuestro personal sanitario tiene que padecer las consecuencias. Me veo a Gila presentando los siguientes vídeos: uno hace una mascarilla con una botella de plástico rajada, otra chica simplemente doblando un pañuelo de la cabeza, etc… Ver esto y lo que tienen que padecer nuestros sanitarios, es para tomárselo con humor. No escucho a nadie que diga: Una mascarilla, para que sea válida y cumpla su función, debe reunir al menos las siguientes características. Aquí la iniciativa es la que vale

Es triste ver que se te muere un familiar, que tiene que estar sólo y al entierro no puede ir ni la familia, ni los amigos. Pero si esto es mucha tristeza, no es menos triste oír que por incinerarlo le han querido cobrar más de 5.000 euros.

Hay muchos que se resisten por diversas causas a entrar en las tiendas, bares, etc. de los chinos. Para estos hay que decirles: Bien es verdad que en China fue dónde apareció la epidemia, pero también hay que tener en cuenta, que si no hubiese sido por todo el material que los chinos nos han mandado (donado o bien pagado), quizá no le viésemos luz a este túnel que tan largo es y tantos daños causa y causará.

Próximo tema: Difícil reflexionar

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