domingo, 17 de julio de 2022

El manejo del dinero


(Escrito el 10 diciembre 2021) 

Los que ya tenemos muchos años y nacimos en pueblo, hemos visto muchas formas de cómo se manejaba el dinero. Como había poco, se veía poco y los intercambios eran de muchas formas.

En las tiendas del pueblo muchas veces se compraba al debe. El comerciante te apuntaba lo comprado en su cuaderno y cuando convenía se pasaba cuentas. En la carnicería en lugar de libreta se usaba la caña rajada. Media caña para el que vendía y la otra media para el que compraba. A cada unidad se le hacía una muesca en las dos y al final se contaban las muescas que había.

Las fechas de pasar cuentas eran distintas, según cuando se habían obtenido los ingresos de los corderos que habías vendido, del carbón que habías sacado, de la leña vendida, de la cosecha, etc. En un poema que leo de cuando venían los segadores valencianos decía: antes de partir al tendero y carnicero le advertían que prestara a su mujer en su ausencia. Al regreso traería dinero y le pagaría.

Algunas veces se procedía al trueque o cambio y así se cambiaba en otros pueblos patatas o judías secas por aceite. Si al que se le debía necesitaba trabajadores, lo que se debía se devolvía en jornales y otras veces al herrero, carpintero, etc. en lugar de pagarle se le labraba el campo o se le trillaba la parva. En el bar se pagaba con dinero.

Con el paso del tiempo, la emigración, etc. conocimos otros sistemas. El más usado era ir a la Entidad Bancaria con tu libreta, te apuntaba lo que sacabas y ¡hasta otra! En los comercios y establecimientos se pagaba con dinero contante y sonante. Más tarde llegarían las tarjetas de crédito y con ellas los Cajeros en los que podías sacar tu dinero.

Todo esto parecía que se hacía con el único fin de ayudar al cliente, pero llegó el momento de que había que ayudar a la Entidad Financiera. Hasta ciertas cantidades ya no las puedes sacar en ventanilla, tienes que ir al Cajero. En el Cajero hay que pagar los recibos y del Cajero tienes que sacarte el resguardo del gasto que te han anotado. Entrar a la Entidad pocas veces y casi siempre con Cita Previa.

El pago con tarjeta se ha extendido tanto, que para ampliar esta forma de pago ahora se ha ampliado al teléfono móvil. Vayas dónde vayas y compres lo que compres sin llevar un euro encima puedes pagar desde cosas serias hasta los caprichos.

¿Qué dice Celedonio de todo esto? Cuando algunas veces al hacer un pago mentalmente lo transforma en pesetas, me parece que esta forma de manejarse no la comparte totalmente. Si bien con la Pandemia se ha atribuido que al no manejar dinero se disminuye el posible contagio, otras veces se atribuye a que se ahorra tiempo con esta forma de pago. Otras personas quizá digan que no disponen de tiempo para ir al cajero, pero al jubilado es lo que le sobra. Hay que invertir el tiempo y a veces no sabes en que.

Para el que de alguna manera te ha gustado tener presente lo que gastas cada mes y llevas anotadas las cuentas mensuales a tu manera, conocer como lo llevas te da una tranquilidad. Pagar con la tarjeta o el móvil todo y esperar a saber a fin de mes cómo te ha salido, no me gusta del todo.

La modernidad y los adelantos también nos han llevado a menos trabajo y más paro. ¿Qué pasaba con el personal de las autopistas cuando te cobraban los peajes? ¿Qué decir cuando te pones combustible en la gasolinera? Como las Entidades gracias a su automatización se han hecho más grandes por las fusiones, más gente al paro.

Antes el dinero no se veía porque no había y ahora que hay tampoco lo ves, pues todo se ha dispuesto para que sea así. En muchos pueblos actualmente al no tener ni entidad bancaria ni cajero, se las ven y se las desean para tocar el dinero que es suyo. Como termino otras veces ¡vivir para ver!

Próximo tema: Cuando los años ya pesan (08)

 

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